Apegos feroces de Vivian Gornick.
Leo la mitad de estas memorias y el interés que me despiertan es nulo. Los cotilleos insípidos y las anécdotas poco memorables parecen ser la gasolina de Gornick. Puede tener algo de valor como documento histórico en el que quedan grabadas ciertas conductas cuestionables que resuenan hoy en día (machismo, racismo, homofobia...) pero falta profundidad y perspicacia en todos los flancos. No hay grandes reflexiones y en general es un texto poco revelador. Tampoco ofrece gran cosa en términos maternofiliales.
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Hace 23 horas
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