A Questionable Shape de Bennett Sims.
Llamó mi atención porque el autor recibió clases de escritura creativa de David Foster Wallace. Novela de zombis que quiere desmarcarse del género. El
protagonista presenta dos propósitos claros: 1. ayudar a un amigo a buscar a su
padre zombi y 2. prepararse, junto a su novia, por si uno de los dos se
convierte en zombi. Ese intento de originalidad que evita caer en lugares comunes, "no quiero ser una típica novela de zombis", desemboca en una obra que se
desarrolla como suma de ideas y reflexiones, carente de acción y que está plagada
en exceso de intelectualidades. El autor resulta muy pedante cuando menciona a
Kant, Wittgenstein, Hitchcock, Tarkovski, etc., para en el fondo no llegar a
ninguna parte, simplemente presentar dos o tres ideas más o menos ingeniosas. Esas
referencias parecen antojos del autor que quiere demostrar todo su bagaje
cultural y artístico, pues no conectan con el dibujo más grande. Toda esta
pedantería se acentúa con su tendencia a ser
wordy, esto es, añadir
términos extravagantes que son innecesarios con el fin de 1. parecer más
inteligente y 2. exhibirse lingüísticamente. Sí que se aprecian algunas ideas
interesantes sobre la memoria y la identidad, pero no llegan a coger altura. Además,
las analogías y las metáforas, si bien reflejan la capacidad asociativa y
poética del escritor, resultan demasiado recurrentes, el recurso se vuelve
repetitivo y el tedio nos muerde en el cuello. En mi opinión, no es necesario
suprimir toda acción para esquivar los clichés o los convencionalismos del
mundo de los zombis. Peca de ser demasiado intelectual, de querer rechazar todo
lo terrenal, típico, y más allá de alguna idea suelta, no llega a ninguna
parte.