El hombre que fue Jueves de G. K. Chesterton.
Ojalá tuviera que ver con Júpiter. Un policía se cuela de espía en un grupo de anarquistas y en su afán de bloquear los actos del grupo, va descubriendo que todos los miembros son también espías de la policía, excepto el jefazo que al final resulta ser algo así como Dios. El autor juega con las confusiones, las máscaras, ocultar la realidad... Es un texto demasiado intelectual, tiene algunos retazos de humor y diálogos más o menos buenos, pero es muy mental. Aparte de algunos pinchacitos filosóficos/¿metafísicos?, no veo ningún mensaje nítido, ningún golpe contundente que tuerza dientes en sonrisa Colgate que no es la mía. Se lee bien y tal, pero no digo que merezca la pena.