Zona crítica es un cómic excesivo en todos los aspectos, sobre todo en lo que a comportamientos ofensivos se refiere, sobrepasando con creces la cuota máxima recomendable de bromas sexuales y de consumo de drogas, aunque supongo que esa es la idea. Hanselmann se mofa de la sociedad actual llevándolo todo hasta el extremo: mundo digital, redes sociales, racismo, tendencias LGTBIQ+, liberalismo, etc.
En el fondo, es una obra que lo defiende todo y lo critica todo a la vez, normalizándolo y parodiándolo al mismo tiempo, jugando con lo que puede
ser ofensivo para muchos y riéndose de ello. Los dibujos son básicos y a nivel formal es bastante convencional, no juega con la estructura de las viñetas ni el flujo visual, pero eso genera un contraste sugerente con todo lo que propone a nivel contentual.
Hanselmann parece decirnos que el mundo se ha vuelto loco entre tanto activismo a favor y en contra de tantas cosas: racismo, transexualidad, "ser woke", transfobia, fascistas, antifascistas, etc. Y él pasa de todo aun identificándose como queer con disforia de género (sus propios términos), evitando las etiquetas y presentando personajes relativamente transgresores que no se toman esto como una conducta especial, sino como algo normal.
Quizá lo más destacado es que el autor logra transgredir sin asociarse a un discurso político o a un colectivo. Hay mucha autenticidad en su transgresión. La lección implícita es que en esta vida se puede ser lo que quieras sin necesidad de sentirte amenazado o adoptar una postura radical o beligerante. Esto a su vez ayuda a que la gente "normal" acepte estas tendencias con mayor naturalidad. Visto con los ojos adecuados, es un cómic que te puede hacer más tolerante y que abras tu mente para aceptar a todos los seres humanos.
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