22 de agosto de 2010

Orín de rata

Firmin de Sam Savage.

Sencillo y para toda la familia.
No para mí.
Cómete tu mainstream.
Mediocre.
Véndemelo bien.
Con unas patatuelas.

17 de agosto de 2010

df

aleister crowley
el sheriff
y
el libro de la ley

DFCHABKBDALGMORCYXXHIRPSTOV

418

Dah ppy birth day

V.O.
T.S.
PRIH
XXsiglo
Y
CROM
GLAD
BurgerKing
BACHjuanitosebastián
F.D.

dame pistas
anglosajón

lo otro lo entiendo
es más
ya lo sabía
pero
gracias

Preferiría no hacerlo

Bartleby el escribiente de Herman Melville.

Acerca de la estupidez-soledad-insensatez-abandono-insignificancia-estoicismo-autismo-indiferencia... y... no le acabo yo de pillar el puntillo al asunto en toda su magnitud. El autor crea interesantes estados de ánimo y cierta empatía irregular hacia el personaje. Está bien pero no me acaba de golpear. Interpretación la que gustes. Quizá es un texto que en sí mismo quiere ser insignificante como el protagonista o que podría haber sido insignificante pero no lo es. Supongo que habla de la insignificancia de todo hombre y quizá de toda obra escrita o de la mayoría. La mayoría de textos mueren (a no ser que seas un máquina o comas anises) y Bartleby se percata de que sus escritos son irrelevantes de ahí su apatía, su abandono. Bartleby se limita a copiar, no crea, y crear es la esencia de la vida. El trato con escritos irrelevantes le redirige a lo que su anterior trabajo con las "cartas muertas" significaba y a partir de ahí llega el eremitismo radical. Un eremita dentro del núcleo social por la perspectiva de su insignificancia. Al fin y al cabo un eremita (residente en ermita) se enfrenta cara a cara con la muerte de forma espiritual. Aquí más bien hay un abandono a ella por la incapacidad de trascender. ¿O quizá no? Quizá el autor quiere remarcar la diferencia entre dos tipos de personas...

Töastöen (tostón en noruego)

Salir a robar caballos de Per Petterson.

No lo intentéis en casa, puede ser perjudicial para la salud.

P.D.: hasta las heces más supinas van a tener cabida aquí para llevarse palos, uno detrás de otro.

10 de agosto de 2010

Verstörung

Trastorno de Thomas Bernhard.

Empieza clásicamente con un hijo y un padre médico que van visitando a enfermos. Se va creando una atmósfera de enfermedad y oscuridad que más tarde se rompe al emulsionar cuando visitan al príncipe. Con sus palabras empieza un estilo narrativo característico que pone en jaque al lenguaje y al entendimiento en varias ocasiones. Monólogo filosófico-espiritual-mortal-ymuchomás que lanza el príncipe a sus oyentes... Mezcla el genio y la locura en una baldosa. Torrente de ideas y cuestiones plantea. Infinidad de temas. Original estilo bombardeo. Gran libro.

Estupidez ábrete

Cuatro patas para un sueño de Álvaro de Laiglesia.

¡Mejor no lo hagas!

4 de agosto de 2010

Orfalís

El profeta / El vagabundo / El loco de Gibran Jalil Gibran.

Se supone que son obras separadas pero venían las tres en la misma edición. El que más me ha gustado ha sido El vagabundo. ¿Había más animales? Los tres son parecidos en estructura y en la forma de expresar, un personaje que comparte sus verdades con lenguaje sencillo pero cargado de metáforas cuyo objetivo es guiar e iluminar. Me recuerda a las fábulas de Esopo y algo al Rubaiyat. No está mal.