El optimismo... El amigo Cándido ve la vida y todo lo que le
sucede como si estuviera en el mejor de los mundos posibles. Viaja de un lado
para otro escapando de los malos y persiguiendo a la mujer que ama, Cunegunda.
Aunque el sufrimiento recaiga sobre su espalda en forma de latigazo, de robo o
de rechazo amoroso, él se escuda en el "todo sucede para bien". La obra está
cargada de ironía y sarcasmo, criticando el optimismo incondicional así como la
conducta y la moral de la sociedad de la época. Lo más interesante son las
ideas. Creo que el mayor defecto del
texto es que todo sucede demasiado rápido, Voltaire no se detiene a profundizar
en ciertos temas o situaciones que quizás lo requieran. El libro pasa en un visto y
no visto. Podría haberse extendido algo más en el desarrollo para dar más peso a algunas reflexiones
o para brindar más sabor literario al conjunto. La prosa tampoco brilla demasiado. Puesto de otra forma: edificio
filosófico que ha descuidado el ladrillo. Ni fu ni fa.
Rubem Fonseca: El salvaje de la ópera
Hace 3 horas
Sí sí, claro, ni Borges, ni Cortazar, ni Proust, ni Calvino, ni Voltaire, ni Bolaño, todos unos mediocres. En fin, entiendo que estás ejecutando un rol y en eso consiste la gracia, de otra forma, miedo me daría ser tú mismo.
ResponderEliminarCuestión de gustos.
Eliminarel tuyo es el masoquismo
EliminarVoltaire... Pero si es una mente preclara, Condie!
ResponderEliminarNadie más crítico, más irónico, más incisivo, más agitador que él. Déjate de edificios. Fíjate en el "vitrail", en los colores, en la luz que se cuela a través de la ventana.
No puedo estar de acuerdo contigo esta vez, desde un punto de vista racional. Voltaire es necesario. Es imprescindible. Saludos.
Ire, que no, que no, que es cuestión de gustos mujer... Si es que no hay manera; no entendeis al chiquillo. Dejadle que juegue y disfrute.
EliminarSí, sí, filosóficamente hablando está bien, pero como texto literario "completo" deja mucho que desear.
EliminarQuizás lea buscando una totalidad o textos que se acerquen a ella. Estarás de acuerdo en que un libro con ideas buenas pero un desarrollo malo, no es una gran obra literaria.
Pero es que yo tampoco estoy de acuerdo en que el desarrollo sea "malo". Justamente la gracia es que no pontifica, al contrario, le presenta al lector un crisol de situaciones, dramáticas en su mayoría, pero relativizadas por el protagonista, para que sea el lector quien decida, quien opine, quien reflexione sobre lo absurdo de unos valores aceptados como buenos por la sociedad, y no solo de su época. No, no me parece que el desarrollo sea malo sino todo lo contrario. Pienso que su profundidad, que creo que la tiene y mucha, se debe en parte a la aparente superficialidad de su estilo.
EliminarQue todo vaya deprisa no tiene nada que ver con pontificar. Tampoco veo la profundidad del texto. Ideas filosóficas interesantes hay, pero sigo creyendo que quizás para nuestra época están ya muy masticadas.
EliminarAhora me vas a tener que explicar lo de "su profundidad [...] se debe en parte a la aparente superficialidad de su estilo". ¿Cómo es eso?
Bueno, lo de para su época... pues no sé. Yo creo que no ha cambiado nada. Sigue habiendo guerras estúpidas, gente sin escrúpulos, intereses, etc.
EliminarCándido está directamente relacionado con El Buen Salvaje, que Voltaire detestaba. Voltaire intenta demostrar, o más bien ironizar, sobre el supuesto efecto negativo que ejercía la sociedad en el individuo, según Rousseau, que nacía puro. A partir de ahí, creo que tanto los comportamientos y actitudes de Cándido como las de sus compañeros o la gente que se cruza con él, son solo parodias fácilmente identificables sobre las que centra sus críticas, pero todo eso gracias a un esquema mínimo que le sirve para destacar el conjunto. Creo que está bastante claro, aunque seguramente necesitarías más espacio, ejemplos, etc. para desarrollarlo.
Si te interesa me lo dices. Saludos.
Entiendo lo que comentas, pero sinceramente, el texto no me ha transmitido gran profundidad filosófica. Qué quieres que le haga.
EliminarBien! Ahí está el todo. No quiere transmitir gran profundidad filosófica. Se ríe de unos y otros y, al final, lo único que importa es lo que cada cual haga con su vida.
Eliminar¿Te parece poco profundo? Me alegro de que al final lo hayas visto. Imprescindible, no?
Ire, gracias por intentarlo pero sigue sin convencerme. Alabas el libro mencionando recursos que no encuentro en el texto. No creo que resalte el conjunto, que sea superficial aposta, ni que tenga profundidad alguna. Me parece un libro de filosofía ligera con cierta gracia, que quizás para la época las ideas serían la hostia y el humor tremebundo, pero ahora no me llega tanto.
EliminarOk, si es que no, es que no, está claro.
EliminarEn lo que a mí respecta, ojalá un tercio de las obras "serias" actuales tuviera un cuarto del poder reflexivo de ésta. Pero...
Saludos
Hombre Ire, es que la mayoría de obras actuales están bastante lejos. "Cándido", aunque no me apasione, juega en otra liga.
EliminarBueno, cámbiale un poco el contexto y las situaciones y pregúntate si el conflicto entre individuo y sociedad no sigue vigente como si no hubieran pasado el porrón de años que nos separa del pobre Cándido.Y encima, con unas risas.
EliminarNo parece tan difícil hacer algo así, la verdad y sin embargo...
Hacía tiempo que no lo decía, pero la ocasión obliga;
ResponderEliminarCondón, qué cateto eres!
Es que aquí muchos le reís las gracias porque os creeis que si no les gustan muchas obras es que sabe.
ResponderEliminarNo, no sabe.
Cándido, demasiado rápido. Cervantes, demasiado lento. Shakespeare, demasiados puñales. Tolstoi, demasiado francés. Conrad, demasiados marineros. Borges, demasiadas enciclopedias. Twain, demasiados niños. Flaubert, demasiado provincial. Nabokov, demasiados adjetivos. Melville, demasiadas ballenas. Dante, demasiados, círculos.
ResponderEliminarCoño, a ver si la literatura universal nos da un solo escritor que valga la pena.
Desde aquí veo 80 libros a los que he puesto estrellitas, es decir, que bajo mi punto de vista merecen la pena...
EliminarPara mí cada obra es una virgen deseosa de perder el himen. Que hace años unos señores, en otra dimensión temporal, fornicaran con la misma mujer no quiere decir que ese texto deje de ser virgen para mí. Si te dejas influenciar por desvirgadores añejos, vas a entrar en ese libro y no te va a parecer virgen y gran parte de la magia se pierde. Cúlpame por sentir que desvirgo a cada texto.
Y si esas virgencitas no gritan de placer, las llamas frígidas.
EliminarMe encanta cómo utilizas el diminutivo para que parezcan más frágiles. Ahí detrás hay una mente perversa :)
EliminarEl que tiene que gritar de placer soy yo. Y si esto no sucede es porque el ángulo de incidencia del texto, de su luz, no pega con toda la fuerza que debería en mi posición actual (si es que la potencia de su quemadura está demostrada gracias a la masa de lectores que lo tachan de obra maestra).
A mí me encanta lo de "tachar" de obra maestra. Muy revelador.
EliminarTienes razón en lo de mi mente perversa.
Disculpa el lapsus, es que entre tanta virgen...
EliminarTu comentario de Cándido está a la altura de un examen de primero de la eso. Penaeque no te haya gustado.
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