La escoba del sistema de David Foster Wallace.
Esperaba algo mejor, pero no está mal (obviamente, he leído antes La broma infinita y eso genera grandes expectativas). Es una obra altamente autobiográfica, donde la personalidad del autor está repartida entre los personajes... vanidad de segundo orden (la vanidad de preocuparse de que otros piensen que eres vanidoso), la soledad, el lenguaje, la conexión con el otro, las relaciones amorosas, etc. Creo que hay una preocupación excesiva en la estructura (fragmentada) y en relacionar a los personajes como sea, y eso lo sufre el contenido. Maneja ideas interesantes que por culpa de la fragmentación no acaban de cocinarse como deberían, como si cambiáramos el sofrito de sartén constantemente y no acabara de alcanzar la plenitud de su sabor. Es una obra con mucho humor y en este apartado creo que supera a La broma infinita. Se ve una gran preocupación por el lenguaje, y la cuestión clásica de si el lenguaje viene de la realidad o la realidad viene del lenguaje y todo lo que eso supone para la identidad. El estilo está bien, algo pesado a veces, demasiado autoconsciente, pero en general bien. Ese "cuéntame una historia" que aparece varias veces en el texto viene de Manuel Puig, así como los recursos de ciertos diálogos. Hay un exceso de "no te entiendo, explícamelo bien" en los diálogos, usado como excusa para extender el tema y que parezca natural. Tiene sus vicios y sus virtudes, pero está claro que es una novela bastante mejor que la gran mayoría de las que circulan por ahí. He leído que en esta novela Wallace dice muchas cosas en clave sobre las teorías de Wittgenstein. La relación entre lenguaje e identidad es obvia, pero no he sido capaz de ver más allá de eso, no sé hasta qué punto un lector no obsesionado con el lenguaje puede entender todo lo que supuestamente Wallace quiere decir.
3 de julio de 2013
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Yo leí la Broma en menos de un mes y en leer La escoba he tardado casi dos meses.
ResponderEliminar¿Qué quieres decir con eso?
ResponderEliminarSí, condonumbilical, soy subnormal: ¿Por cuál empiezo con Wallace entonces? ¿Por La broma infinita —y no actualizar el blog en un mes—, por alguno de sus otros libros o por esta misma? A mí la que más me apetece a priori es El rey pálido (eso del aburrimiento de funcionarios me pone mucho) o el de Entrevistas. Yamedicesgraciasmuybuenas.
ResponderEliminar"La broma" es mejor que "La escoba". Yo empecé por "La niña del pelo raro". Supongo que es más fácil empezar por algún libro de relatos, así le vas cogiendo el punto al estilo. "El rey pálido" no sé qué tal es.
EliminarMuy buenas, gracias.
Quería decir que La Broma la devoré sin pausa. Si La Escoba me hubiera enganchado tanto como La Broma, la hubiera leído en una semana.
ResponderEliminarCreo que el humor es mejor en "La escoba" pero todo lo demás es superior en "La broma".
EliminarCreo que uno de los problemas de Wallace es que es tan autoconsciente y tan freaky del lenguaje y lo intelectual que a veces es difícil conectar con él. Y su primera novela es más egocéntrica por lo que creo que es más difícil conectar.