El talento de los demás de Alberto Olmos.
Se divide en tres partes, cada una de ellas diferenciada tanto por el contenido como por la estructura narrativa. Historia de un joven violinista que gana muchos torneos internacionales hasta que pierde su talento y se pone a trabajar de telefonista, para finalmente acabar participando en un experimento farmacéutico.
Circulea (¡y olé!) el tema del talento y el genio. El propio autor lo expresa en el texto: escribir es rellenar, y efectivamente, más de la mitad del libro sobra porque es relleno. Para que este relleno no se note, utiliza mucho vocabulario y una prosa cuidada. Fragmentos que digan cosas más allá del adorno, se salvan cuatro, el resto es todo parafernalia y filigrana.
Según el autor, el relato es un término menor. Señor, este libro que ocupa (y digo ocupa) más de 350 páginas, podría haber sido un relato tranquilamente, sin necesidad de añadir frases y frases "mamá mira cómo relleno" y frases y frases "pásame la crema pastelera".
Rubem Fonseca: El salvaje de la ópera
Hace 2 horas
Mira,mamá,sin manos...jajaja
ResponderEliminar¿Circulea?8-)
Tienes usted un mensaje nuevo en la bandeja de entrada.
:nodigonada:
Ya me quedó clara tu asociación de ideas, cristalino todo, gracias!
ResponderEliminarNo lo conocía. Lo apuntaremos en la lista...
Usted es muy valiente y sincero, de manera que lo agrego en mi blogroll.
ResponderEliminarGod Bless You