El señor Nguyen es capaz de invocar al espíritu de la insulsez extrema sin pestañear y este se manifiesta en el papel con tanta rapidez que en la página 42 salgo corriendo antes de ser devorado. No obstante, sus fauces sí que le hincaron el diente al Premio Pulitzer de ficción de 2016. Desconozco el porqué.
Creo que en este texto hay un número importante de carencias. La prosa es aceptable y el tema tiene interés, pero falta precisión narrativa para que el ritmo sea ágil y para que, a falta de sucesos estimulantes, al menos todo fluya y te puedas dejar llevar fácilmente. El tono del narrador tampoco suele ser apropiado y los personajes son poco atractivos. Se agradecen los chispazos de humor, pero no siempre funcionan. No lo recomiendo.
Pues a mí me encantó, es un libro relativamente largo pero no me pareció tedioso, la historia es bastante potente (un agente doble que tiene que traicionar a amigos cercanos) y también recuerdo cierta ironía del narrador que hacía la historia más atractiva. Los chispazos de humor no sé si funcionarán siempre, pero tú has leído los juegos de palabras que sueles hacer tú? x-P Por cierto, el final sí que me pareció que flojea un poco, pero deberías darle otra oportunidad. Saludos
ResponderEliminarEl tema me pareció interesante, pero no conecté para nada con el texto.
EliminarNo seré yo quien defienda mis juegos de palabras :P
Antes de darle otra oportunidad, tengo una larga lista de libros pendientes. Si finalmente lo hiciera, intentaría conseguirlo en versión original, este lo cogí de la biblioteca en español.
Un saludo