17 de agosto de 2010

Preferiría no hacerlo

Bartleby el escribiente de Herman Melville.

Acerca de la estupidez-soledad-insensatez-abandono-insignificancia-estoicismo-autismo-indiferencia... y... no le acabo yo de pillar el puntillo al asunto en toda su magnitud. El autor crea interesantes estados de ánimo y cierta empatía irregular hacia el personaje. Está bien pero no me acaba de golpear. Interpretación la que gustes. Quizá es un texto que en sí mismo quiere ser insignificante como el protagonista o que podría haber sido insignificante pero no lo es. Supongo que habla de la insignificancia de todo hombre y quizá de toda obra escrita o de la mayoría. La mayoría de textos mueren (a no ser que seas un máquina o comas anises) y Bartleby se percata de que sus escritos son irrelevantes de ahí su apatía, su abandono. Bartleby se limita a copiar, no crea, y crear es la esencia de la vida. El trato con escritos irrelevantes le redirige a lo que su anterior trabajo con las "cartas muertas" significaba y a partir de ahí llega el eremitismo radical. Un eremita dentro del núcleo social por la perspectiva de su insignificancia. Al fin y al cabo un eremita (residente en ermita) se enfrenta cara a cara con la muerte de forma espiritual. Aquí más bien hay un abandono a ella por la incapacidad de trascender. ¿O quizá no? Quizá el autor quiere remarcar la diferencia entre dos tipos de personas...

1 comentario:

  1. ¿Tú qué le vas a pillar a una joya de relato, si eres borderline?

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